En cuestiones de ligoteo, mucho ha cambiado el panorama en cuanto a plataformas digitales se refiere. Hace unos veinte años, los foros y los ‘chats’ revolucionaron la forma en la que empezamos a conocer gente y, en tan solo dos décadas, todo aquello que parecía que sería algo en lo que plantarnos, evolucionó hasta lo que hoy conocemos como ‘apps’ de ligue (hoy, Tinder, Happn, Meetic, Adopta un Tío y demás están normalizadas entre la sociedad y las distintas horquillas de edad).
Con el tiempo –y arrastrando a sus defensores y detractores–, lo que es indiscutible es que estas aplicaciones han irrumpido en nuestras conversaciones y, también, han modificado conductas. También hemos aprendido lo que es el ‘ghosting’, el ‘benching’, el ‘love bombing‘, y demás técnicas que quizás practicábamos antes (sin tecnología), pero que ahora han adoptado nombres anglosajones para dar forma e identidad a lo que hacemos (o nos hacen) en estas plataformas.
‘WHELMING’, EL NUEVO HÁBITO DE LIGUE DIGITAL EN ‘APPS’
Así, la periodista Patia Braithwaite ha descubierto una técnica nueva a la que ha acuñado el apodo de ‘whelming‘ (o abrumar), que supone que una persona (sobre todo, hombres) alardean de que se sienten abrumados por cómo triunfan en las redes sociales. Lo descubrió hablando con varios chicos, que dejaban caer de vez en cuando un: «hoy he hecho ‘match’ con un montón de chicas» o comentarios del tipo: «quedo con muchas chicas a través de ‘apps‘ y no estoy seguro de si realmente quieren quedar conmigo o soy uno más».
Así, ha reflexionado sobre ello con sus amigas, que también han vivido episodios parecidos en este tipo de aplicaciones y se ha hecho la pregunta: ¿es una especie de estrategia digital para hacernos sentir que tenemos que competir por atención y/o aprobación con otras chicas? En un bar nunca me han dicho: ‘mira, otras 37 personas se han fijado en mí, me siento abrumado'».
Y lo cierto es que, pensándolo, también hemos vivido algún capítulo parecido… ¿Te ha pasado a ti? ¿Estamos ante una nueva técnica de ligue, fruto de actitudes rancias y tóxicas, que se ve respaldada por el entorno digital? Seguiremos atentas…